Con el lema, “desmaterialización: ¡Hacer más con menos!”, arranca del 21 al 29 de noviembre, la Semana Europea de la Prevención de Residuos 2015.

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La Semana Europea de la Prevención de Residuos (EWWR) nace con el objetivo de fomentar específicamente la concienciación del acto de prevenir la producción de residuos, para reducir los volúmenes de recogida de basura y la nocividad de la misma.

La enorme cantidad de residuos que generamos supone un despilfarro de materias primas y de energía, la aceleración del cambio climático y el agotamiento de los recursos naturales. El coste del tratamiento de los residuos, asumido por la ciudadanía a través de los impuestos, no para de crecer debido al aumento de los residuos y a la complejidad creciente que supone gestionarlos.

El mejor residuo es el que no se produce

El consumo de productos (incluyendo su producción, transporte y distribución), genera casi el 50% de las emisiones que contribuyen al cambio climático. Si no es procesado, estos productos se convierten con el tiempo en gigantescas montañas de basura en los vertederos.

Generamos unos 10 kg de basura por persona y semana en Europa, pero lo que no vemos es que cada europeo/a cada semana agota 1.000 kg de recursos empleados para fabricar los productos consumidos.

Una de la mejor manera de reducir tal cantidad de residuos es evitando su origen, «El mejor residuo es el que no se produce», es decir; frenando al despilfarro mediante el consumo responsable, dando prioridad a las compras al por mayor, convirtiendo el producto en servicio; y de este modo favorecer lo publico a lo privado, mediante el alquiler o el préstamo. En la vida cotidiana esto podría implicar que el alquiler de herramientas de tu vecino o compañero de trabajo, utilizando algún servicio de coche compartido en lugar de poseer un coche, escuchando música a través de los sistemas de distribución de música digital en lugar de la compra de CDs, etc.

Otro aspecto importante de reducir basura es dar prioridad a los productos diseñados de forma sostenible y a ser posible con etiqueta ecológica. El diseño sostenible evita le generación de residuos innecesarios teniendo en cuenta las diferentes fases del ciclo de vida del producto, incluso teniendo en cuenta los residuos asociados que se generan en la realización de dichos productos, y su posterior gestión.

Además de estas dos formas de reducir los residuos está la de mejorar los hábitos cotidianos evitando el desperdicio alimentario, controlando las fechas de caducidad de los productos y el tratamiento de los residuos en el hogar con el compostaje.

Todos podemos reducir la producción de residuos, aquí os dejo una selección las mejores acciones para prevenir los residuos.

12 sencillas acciones para prevenir los residuos

image Utilizar bolsas reutilizables.
image Pegar un adhesivo en el buzón de casa que ponga “¡Publicidad No Gracias!”.
image No desaprovechar los alimentos.
image Comprar a granel o en gran formato.
image Comprar recambios ecológicos.
image Beber agua del grifo.
 image Limitar el número de impresiones
image Producir compost.
image Utilizar pilas recargables.
image Regalar la ropa vieja.
 herramientas Tomar prestadas o alquilar las herramientas que necesitemos.
image Llevar a arreglar los utensilios.

 

Además en la Semana Europea de la Prevención de Residuos 2015, se ha hecho una selección con las mejores prácticas llevadas a cabo durante pasadas ediciones en el ámbito de las 3R’s (Reducir, Reutilizar y Reciclar).

3R’s (Reducir, Reutilizar y Reciclar)

Reducción

Evitar los residuos en el origen, por ejemplo haciendo compostaje en casa, usar pegatinas “anti-publicidad” en los buzones u optando por beber agua del grifo. Además cubre acciones que pretenden cambiar el comportamiento del consumidor al promover costumbres sostenibles a la hora de tomar decisiones sobre qué van a comprar, como puede ser animar a que adquieran productos con etiqueta ecológica o aquellos productos con muy poco o ningún embalaje, comprar al por mayor o envases familiares, o eligiendo regalos “no materiales”.

Reutilización

Es la manera de dar una segunda vida a los objetos en desuso, promoviendo la reparación de sus objetos y/o la reutilización de los productos en lugar de comprar artículos nuevos, a la vez que se promueve la donación de aquellos productos que ya no necesitamos. Abarca también acciones con el objetivo de cambiar el comportamiento del consumidor en el sentido de comprar productos reutilizables o que se puedan rellenar, alquilar bienes en lugar de comprarlos y acciones similares.

Reciclaje

Bajo este tema entran aquellas acciones dirigidas a ayudar a la gente a mejorar la manera en que clasifican sus residuos a través de, por ejemplo, explicar cómo cerrar el ciclo de los recursos materiales, animar a la gente a llevar sus residuos al gestor apropiado y/o organizando visitas a plantas de separación y reciclaje.