Esta es la conclusión a la que ha llegado la consultora everis al analizar la situación de este sector, en un Análisis comparativo del consumidor de alimentación ecológica.

También se desprende del mismo, que el mercado español de productos ecológicos crecerá en torno al 12% anual hasta 2020 y pasará de los 905M€ de facturación que se registraban en 2008 hasta los 12.182M€ en 2020.

El informe analiza el potencial del país en cuanto a la producción y distribución de estos productos a partir del análisis de la situación del mercado ecológico y el comportamiento actual y futuro de los consumidores españoles. Y para ello hace una comparativa con otros países de Europa como Dinamarca, Alemania, Francia o Inglaterra, donde el mercado ecológico es más maduro, y otros como Italia, en los que los hábitos de consumo y la cultura son similares a España.

A su vez, el análisis señala el crecimiento exponencial de la demanda de estos productos. La salud, el gusto y la calidad son los principales motivos de compra de los españoles, mientras que en Europa destacan, además de la salud, la conciencia medioambiental como factor de compra.

El informe destaca el potencial del mercado ecológico en España donde en los últimos diez años ha crecido a un ritmo del 25%, superando la media de crecimiento del conjunto de la Unión Europea, que se sitúa en un 12% y por encima también del de países con un fuerte arraigo de la cultura ecológica como Dinamarca o Alemania.

Aunque la sociedad claramente parece querer consumir más productos ecológicos (el 65% de la población así lo indica), el precio elevado, el desconocimiento y la dificultad de encontrar productos ecológicos fuera de las tiendas especializadas son los principales obstáculos para el consumo de este tipo de productos.

El estudio señala la viabilidad de reducir los diferenciales de precio entre el producto ecológico y el convencional aprovechando las economías de escala y sin perder margen. Así, mientras que en España esta diferencia es del 74% de media en países como Francia y el Reino Unido el margen se reduce a más de la mitad. El análisis de everis estima que, en caso de reducirse el precio a un diferencial del 40%, el mercado español podría triplicarse y superar los 3.000 millones de euros.

everis concluye que es posible que las compañías reduzcan sus precios sin perder margen de venta ya que, actualmente, este margen en los productos ecológicos es 7 veces mayor que el de los convencionales.


Análisis de everis a partir del estudio de precios de productos como huevos, leche, pasta o zumos.

En este sentido, el estudio realizado por everis considera la necesidad de desplazar las ventas también a la distribución en grandes superficies, para aumentar el consumo ecológico de forma exponencial. De hecho, distribuidores de referencia han desarrollado ya marcas propias, ofertando una amplia gama de productos –inclusive algunos commodity-, y habilitando espacios exclusivos en sus superficies.


Pese a la fuerte demanda, en la actualidad sólo el 1% de la alimentación consumida en España es ecológica, mientras que en países como Dinamarca o Alemania representa cerca de un 7% y un 4% respectivamente
. Y en otros países como Italia, más similares en cuanto a la cultura y la estructura de canales de venta, el peso de la alimentación ecológica es tres veces superior al de España.


Análisis de everis

Otro de los datos extraídos es que aunque España es el principal productor de Europa de productos ecológicos, la realidad es que más de la mitad de la producción se exporta al mercado europeo. Un tejido agrícola ecológico poco desarrollado aún y orientado a la exportación, son las causas de esta recesión con respecto a Europa. Además, el país cuenta por el momento sólo con pequeños productores con volúmenes medios de facturación de 60.000 euros que difícilmente pueden aprovechar las economías de escala para poder ofrecer precios más competitivos.

Ante esta situación, el análisis apunta la necesidad de que estos pequeños productores aumenten sus volúmenes de producción para aprovechar las economías de escala que les permitirán reducir los precios sin perder sus márgenes. A su vez, el estudio destaca la necesidad de crear alianzas entre tiendas especializadas y productores, para reducir así los precios y poder ganar competitividad respecto a los grandes distribuidores. Esto  ayudaría también a dar respuesta al crecimiento de la demanda futura de los consumidores.

En definitiva, tanto las motivaciones de compra como el perfil del consumidor tipo español coinciden con los atributos que definen al consumidor europeo. La diferencia recae en que mientras que en Europa ya se ha alcanzado la masa crítica o una mayoría de la población, en España los consumidores ecológicos todavía se consideran early adopters y representan un pequeño nicho de mercado con un gran potencial de crecimiento en el futuro inmediato.

Fuente: everis