El 17 de junio se celebra el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía. Este año 2013 el objetivo está enfocado a evitar la degradación del suelo, con el lema “¡No dejes que nuestro futuro se seque!”.

La Desertificación es la degradación de las tierras de zonas áridas, semiáridas debido a diversos factores, tales como las variaciones clima y las actividades del hombre. Todos sabemos que el agua es fundamental para todas las formas de vida conocida, por lo tanto es el recurso más valioso que existe, y hay que cuidarlo.

Solamente el 1% del agua del planeta es potable

 

A pesar que la tierra está rodeada de agua, tres cuartas partes del globo son agua, solamente un 1% es agua dulce en forma líquida, el 97% es agua salada, y el 2% restante está en estado sólido en plataformas de hielo formando glaciares e icebergs en la mayoría en latitudes próximas a los polos.

El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, manifestó que los costos sociales, políticos y económicos de la sequía son evidentes en numerosas partes del mundo y recordó la gravedad de las que han padecido Nigeria, Estados Unidos y el Cuerno de África en épocas recientes.

Las zonas áridas ocupan más del 40% de la superficie de la tierra

Hay que resaltar que la poblaciones que viven en tierras áridas del mundo, ocupan más del 40 por ciento de la superficie terrestre de nuestro planeta, y se encuentran entre los más pobres y más vulnerables al hambre. Por lo tanto, importante que el agua potable llegue a la mayoría de la población mundial para el desarrollo de la población. Este es un requisito a cumplir en la agenda posterior a Río+20 y de la agenda 2015 para un desarrollo sostenible.

El agua en cifras

El gasto de agua en los países desarrollados es desproporcionado respecto a otras zonas más áridas del planeta. Por ejemplo en EEUU utilizan 30 veces más agua por persona que en África Subsahariana.

• Cada año 60 millones de niños nacen sin acceso al agua potable.
• 6.000 niños mueren cada día por enfermedades relacionadas con la calidad del agua.

Según las Naciones Unidas, en el mundo, “884 millones de personas no tienen acceso suficiente al agua potable, y más de 2,6 billones no poseen instalaciones sanitarias. Anualmente mueren dos millones de personas a causa de esto, la mayoría son niños“.

 

En el año 2030 necesitaremos un 35% más de agua

En el año 2030 la demanda de agua se prevé que aumente en un 35 por ciento. A menos que cambiemos nuestras prácticas de uso de la tierra, nos enfrentamos a la perspectiva de la disminución y un suministro inadecuado de agua, así como sequías más frecuentes e intensas.

Medidas a llevar a cabo

Para evitar que avance la sequía en el mundo debemos implicar a la población y a los políticos para que tomen medidas a favor de la racionalización del agua, recuperación de agua para regadío mediante el tratamiento de las aguas grises y la desalinización, y evitando la sobreexplotación de los acuíferos debido a la agricultura intensiva.

Para impedir esto es obligatorio  crear políticas sociales para llevar el agua a las poblaciones más desfavorecidas, cuidando el suelo mediante la reforestación mediante la plantación de árboles autóctonos, evitar la agricultura intensiva, sustituyéndola por una sostenible y respetuosa con el medio ambiente y evitando de este modo la desertización del suelo.

Fuente: www.un.org