Por primera vez un grupo de investigadores han sido capaces de determinar la posición de catorce especies de peces en relación con su comida. El resultado es un gráfico multidimensional, que puede ser muy útil para ayudar a predecir la fortaleza de especies similares a partir de las interacciones tróficas.

El gráfico en cuatro dimensiones parte de un nuevo marco teórico para la determinación de características alimentarias de las especies a partir de datos empíricos. Dónde el nicho trófico tiene una geometría pseudo-euclidiana, que se  define por las distancias entre los consumidores y los recursos.

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¿Qué es un nicho ecológico?

El concepto de nicho ecológico es un concepto bastante abstracto pero muy importante en la ecología, pero ¿que es un nicho? .

Partiendo de la premisa que los organismos de cualquier especie sólo pueden sobrevivir, crecer, reproducirse y mantener una población viable dentro de ciertos límites de condiciones y recursos. En ecología, un nicho es un conjuntos de funciones o características relacionales por las cuales una especie o población puede mantener una población viable. También puede definirse como la posición relacional de una especie o población en un ecosistema. En otras palabras, cuando hablamos de nicho ecológico, nos referimos a la “ocupación” o a la función que desempeña cierto individuo dentro de una comunidad. Desde un concepto matemático podemos definir un nicho ecológico como un gráfico de n dimensiones dentro del cual la especie puede desarrollarse.

El nicho ecológico es un concepto, no un lugar físico. El lugar físico es el hábitat. Esto quiere decir  puede haber varios nichos ecológicos dentro de un mismo hábitat.

Por ejemplo en un bosque puede haber distintos nichos ecológicos, según las funciones que desempeñen las especies dentro del ecosistema: dependiendo de la alimentación de el lugar donde vivan, etc.

El nicho ecológico depende de las adaptaciones estructurales del organismo, de sus respuestas fisiológicas y su conducta. Puede ser útil considerar al hábitat como la dirección de un organismo y al nicho ecológico como su “profesión”. El nicho ecológico no es un espacio demarcado físicamente, sino una abstracción que comprende todos los factores físicos, químicos, fisiológicos y bióticos que necesita un organismo para vivir.

Por ejemplo, los ardillas ocupan el nicho ecológico de alimentarse del frutos de los árboles, los pájaros que están en el mismo árbol y ocupan el mismo hábitat pero su nicho ecológico es diferente, al alimentarse de diferentes cosas, o vivir en diferentes partes, etc.

El concepto ecológico de nicho fue utilizado por primera vez en 1927 por el conocido ecologista Joseph Grinnell, que definió el nicho de un animal como su lugar en el entorno biológico y sus interacciones con los alimentos y sus enemigos.

Más de ochenta años después de la formulación de Grinnell, Leo Nagelkerke de la Universidad de Wageningen (Holanda) y Axel Rossberg del Centro para el Medio Ambiente, la Pesca y la Acuicultura (CEFAS) en Lowestoft (Reino Unido), han hecho posible medir este espacio nicho en términos concretos para un grupo de 14 especies de peces de consumo (Labeobarbus spp., Cyprinidae) y 11 categorías de recursos acuáticos que conviven en el lago Tana, en el norte de Etiopía (ver diagrama).

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Imagen cortesia de Wageningen University y Research Centre

En el diagrama de las dos primeras dimensiones del nicho de alimentos, son los pequeños diamantes amarillos con abreviaturas de dos letras que indican las especies de peces (depredadores), los pequeños cuadrados azules, los de su presas o alimentos. Cuanto más estrechos sean entre sí, mayor será su interacción. Estas interacciones están determinadas por las características tanto de los depredadores (flechas continuas) y sus presas (flechas punteadas). Por ejemplo: “Cr” son las especies de peces “Labeobarbus crassibarbis”, que se encuentra cerca del tipo de alimento “Bentric invertebrates and algae” (invertebrados bentónicos que viven en la profundidad y algas). La característica “Barbel” (Peces con pequeños bigotes o barbos) está muy desarrollado en estas especies, de hecho, se muestra que esta característica morfológica es muy importantes para comer este tipo de alimentos. La comida en sí tiene una puntuación muy baja en la característica “Pelágic” (peces que viven cerca de la superficie) al contrario que los bentónicos viven en las profundidades.

Este trabajo pionero de Leo Nagelkerke y Axel Rossberg ha sido publicado en la edición de este mes de la revista científica Theoretical Ecology.