El 17 de Octubre de 2018, se celebra el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza con el lema: “Unirse con los más excluidos para construir un mundo donde los derechos humanos y la dignidad sean universalmente respetados”.

17 de octubre, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza 2018

17 de octubre, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza 2018

El 17 de Octubre se celebra cada año el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza. Instituido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 1992, con el propósito de promover mayor conciencia sobre las necesidades para erradicar la pobreza y la indigencia en todos los países, en particular en los países en desarrollo.

Esta conmemoración destaca la importancia de alcanzar a las personas en situación de pobreza y de construir una alianza en torno a sus prioridades con ciudadanos y ciudadanas de toda procedencia para poner fin a la extrema pobreza.

De los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también conocidos como Objetivos Mundiales, el primero de ellos hace referencia a terminar con la pobreza en todas sus formas y dimensiones para 2030.

«Recordemos que la erradicación de la pobreza no es una cuestión de caridad sino de justicia», António Guterres, Secretario General de la ONU.

La pobreza en cifras 

La pobreza en cifras 

La pobreza en cifras 

Más de 700 millones de personas siguen viviendo en condiciones de pobreza extrema y luchan para satisfacer sus necesidades más básicas, como la salud, la educación y el acceso al agua y el saneamiento…

Aproximadamente la mitad de los pobres del mundo viven en países de ingresos medianos bajos como China, la India, Indonesia y Nigeria. 

Sin embargo, este problema afecta también a los países desarrollados. Actualmente hay 30 millones de niños que crecen pobres en los países más ricos del mundo.

La forma en que las personas experimentan la pobreza va más allá de vivir con menos de 1,25 dólares al día al día. La pobreza no es solo la falta de medios para llegar a fin de mes o pagar puntualmente las facturas de los servicios básicos. La pobreza es multidimensional y abarca mucho más que el ingreso, como es el saneamiento, acceso al agua potable, electricidad, vivienda, servicios…

Se calcula que unas 1.300 millones de personas viven en pobreza multidimensional, y la mitad son menores de 18 años, según el Índice Multidimensional de Pobreza (IPM) de 2018 publicado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Iniciativa de Oxford sobre Pobreza y Desarrollo Humano (OPHI, por sus siglas en inglés).

La pobreza multidimensional se encuentra en todas las regiones en desarrollo del mundo, pero es particularmente significativa en África subsahariana y Asia meridional, donde habita el 83 por ciento de todas las personas multidimensionalmente pobres. En general, los países con más personas que viven en pobreza multidimensional son India, Nigeria, Etiopía, Pakistán y Bangladesh.

¿Por qué hay tanta pobreza en el mundo?

Las causas históricas de la pobreza son el colonialismo, la guerra, la esclavitud y las invasiones. 

Actualmente la pobreza tiene muchas dimensiones, que influyen directamente en el desarrollo de los países:

  • Semiesclavitud

En una sociedad donde favorece el consumismo, las empresas utilizan trabajadores de los países pobres para abaratar costes y conseguir un beneficio económico mayor, lo que influye directamente en el desarrollo del país.

  • Corrupción

Los recursos destinados a aspectos sociales pasan muy a menudo a manos privadas que los utilizan para su propio beneficio, lo que provoca que no haya un reparto equitativo en la sociedad.

Las sequías son la causa más común de la escasez de alimentos. Cada vez más tierras fértiles sufren de erosión, salinización y desertificación. La deforestación a manos de los humanos causa una erosión acelerada lo cual dificulta la cosecha de alimentos. Lo analizaremos en detalle más adelante.

  • Enfermedades y epidemias

Aunque se puede considerar también una consecuencia del bajo nivel económico de una sociedad, una población enferma es menos productiva. Por eso es tan importante que los países del primer mundo se preocupen por abastecer con los tratamientos necesarios a quienes más lo necesitan.

  • Desigualdades en el reparto de recursos

Hablamos en este caso de capital, infraestructuras o recursos. A veces, no todos los miembros de usa sociedad pueden utilizar por igual este tipo de recursos, lo que puede derivar directamente en una situación de pobreza.

  • Crecimiento de la población

En el año 2011 la población mundial era de 7.000 millones de personas. Ahora, la previsión es que en el año 2050 aumente hasta rebasar los 9.000 millones, según el Fondo de Población de la ONU. Este crecimiento exponencial del número de habitantes del planeta inevitablemente contribuirá al aumento de situaciones de desigualdad si no tomamos medidas para poner freno a las causas que provocan la pobreza en el mundo. 

  • Conflictos armados

Las guerras obligan a la población a desplazarse fuera de su lugar de residencia o a vivir refugiada en países vecinos. Las contienda daña las infraestructuras, limita los suministros básicos como el agua o impide que se cultiven los campos.

  • Discriminación de género

La falta de igualdad entre sexos impide la plena participación de la mujer dentro de la sociedad, limita sus oportunidades de desarrollo o el acceso a los recursos y perpetúa la pobreza. La brecha de género a nivel educativo, salarial o en el acceso a puestos de responsabilidad, son ejemplos de esta desigualdad.

  • Despilfarro de alimentos

Actualmente un tercio de los alimentos producidos en todo el mundo se pierde o se desperdicia. La FAO estima que con una cuarta parte de la comida que desaprovechamos se podría alimentar a más de 800 millones de personas que sufren hambre.

  • Desinterés de los países desarrollados por acabar con la pobreza

La ONG Manos Unidas constata que hay cierta indiferencia de los países desarrollados a la hora de atajar la pobreza, pues la implicación de éstos no está siendo tan rápida o diligente como debería ser.

 

1.300 millones de personas viven en pobreza multidimensional. Fuente PNUD.

1.300 millones de personas viven en pobreza multidimensional. Fuente PNUD.

Unirse con los más excluidos para construir un mundo mejor

El lema de 2018 es “Unirse con los más excluidos para construir un mundo donde los derechos humanos y la dignidad sean universalmente respetados”,  recordando el vínculo fundamental entre la extrema pobreza y los
derechos humanos, cuando se celebra el 70º aniversario de la proclamación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Una de las primeras personas que puso en evidencia el vínculo entre los derechos humanos y la extrema pobreza fue  Joseph Wresinski. El 17 de octubre de 1987, inauguró frente a una multitud constituida por más de 100.000 personas concentradas en la plaza del Trocadero de París, en el Atrio de las Libertades y los Derechos Humanos, una placa conmemorativa en honor a las víctimas del hambre, de la ignorancia y de la violencia. Sobre el mármol de esta placa mandó gravar este mensaje:

“Allí donde hay hombres condenados a vivir en la miseria, los derechos humanos son violados. s. Unirse para hacerlos respetar es un deber sagrado”, Joseph Wresinski.

Mediante estas palabras, Joseph Wresinski subrayó que, para poner fin a la extrema pobreza, se deben aplicar unas leyes nacionales e internacionales fuertes y ambiciosas que tengan en cuenta los derechos humanos, y subrayó la obligación moral de la sociedad y de su ciudadanía para garantizar y respetar los derechos humanos de las personas que viven en situación de pobreza.

Abre los ojos a la pobreza climática

Para acabar con la pobreza y frenar el cambio climático a la vez se requiere un cambio drásticos de modelo de consumo actual, según el último informe del IPCC.

El cambio climático afecta especialmente a la vida de las personas pobres: reduce los rendimientos de los cultivos; destruye hogares; provoca el aumento en los precios de los alimentos y crea inseguridad alimentaria

Los Derechos Humanos, la diversidad cultural y la protección del medio ambiente deben estar asegurados en un futuro sostenible que no incluya desigualdades económicas ni la exclusión de ninguna minoría de la sociedad. En los próximos años, la conservación de los recursos naturales debe asentarse en la sociedad. Igual de importante es proteger al trabajador, garantizar sus derechos y no minusvalorar su actividad.

El conjunto de todas estas aspiraciones es el único camino hacia la erradicación de la pobreza, ya que la evolución de la sociedad no puede sostenerse únicamente sobre un pilar, necesita una buena base de cimientos sociales, laborales, culturales, medioambientales y de convivencia.

El desarrollo no pasa solamente por el avance tecnológico. Las diversas sociedades del planeta dependen fuertemente unas de otras y solo se puede construir un futuro desde el respeto entre individuos, comunidades y naciones. No es posible el avance de la sociedad de un país rico, por mucha tecnología e innovación que posea, si no respeta los derechos de aquellos trabajadores de sus multinacionales que vivan en países en desarrollo.