El próximo día 22 de abril se celebra el Día Mundial de la Tierra 2022, una jornada en la que se reivindica la importancia de salvaguardar el planeta en el presente para el futuro.

Cada vez nos enfrentamos a más retos para proteger nuestro valioso espacio en el que habitamos, porque a pesar de haber comenzado a dar marcha atrás sobre los pasos que la humanidad ha dado, todavía nos queda mucho por enmendar en el camino.

Detectando los principales problemas, podremos combatirlos con prioridad, sin dejar ningún cabo suelto. Aún así habrá otros menos urgentes que también necesiten de nuestra atención continuada.

Si le dejamos respirar, también lo necesita (igual que nosotros), dejamos de presionarle y lo comenzamos a tratar con mimo como lo hacemos cada día con nuestro hogar, puede que nos sorprenda la capacidad regenerativa de los propios ecosistemas del planeta, así como sucede con nuestro propio organismo.

La Tierra es un organismo vivo, que si no lo explotamos hasta sus límites es capaz de renacer de sus cenizas como el ave Fénix.

Día de la Tierra

Infografía del Día de la Tierra.

Principales problemas 

Deforestación

Los bosques cubren casi un tercio de la superficie terrestre del planeta, albergan más de la mitad de las especies terrestres del mundo y son la fuente del 75 % del agua dulce del planeta.

Los bosques son importantes sumideros de carbono, los bosques tropicales, por sí solos almacenan siete veces más carbono del que la humanidad emite cada año y absorben hasta 1,8 gigatoneladas de carbono al año.

Una concentración significativa de puntos críticos de deforestación y donde grandes áreas de bosque remanente se encuentran amenazadas.

Más de 43 millones de hectáreas se perdieron en estos frentes entre 2004 y 2017, un área aproximadamente del tamaño de Marruecos, según el informe de WWF del 2021.

Selva

Los bosques tropicales corren el riesgo de desaparecer.

La mayor parte de la pérdida de bosques se concentra en 24 frentes de deforestación en América Latina, África subsahariana, Sureste de Asia y Oceanía. Tales como la Amazonia, África Central, Mekong e Indonesia.

No obstante, han surgido nuevos frentes en África Occidental (por ejemplo, Liberia, Costa de Marfil, Ghana), África Oriental (por ejemplo, Madagascar) y América Latina, incluida la Amazonia en Guyana y Venezuela y la Selva Maya en México y Guatemala.

Muchos de ellos desaparecen por incendios naturales o provocados, otros para dar paso a la agricultura, o para extracciones mineras, pero también para infraestructuras o para usar la madera como materia prima.

¿Qué puedes hacer?

Su función es vital en el planeta, sin ellos no habría vida, tal y como la conocemos. Por eso intentemos consumir los mínimos productos que provengan de los árboles, reutilizando y reciclando los que ya están en la cadena de consumo.

Contaminación

Contaminación del agua

La contaminación del agua es una cuestión que nos conscierne a todos, pero los gobiernos poco están haciendo para que podamos disfrutar de agua dulce limpia y potable, así como de mares y océanos sin sustancias dañinas para los organismos vivos.

Las analíticas de contaminantes químicos realizadas por los organismos oficiales en el año 2019 muestran que todas las cuencas hidrográficas de nuestro país presentan contaminación por sustancias tóxicas en sus aguas superficiales (ríos, embalses, lagos) y subterráneas, según el último informe del 2022 presentado por Ecologistas en Acción.

Existen numerosas formas de contaminar el agua:

  • Por pesticidas, fertilizantes y otros tipos de productos utilizados en la agricultura intensiva, dando lugar a la eutrofización
  • Vertidos urbanos
  • Descomposición de residuos orgánicos
  • Sustancias tóxicas 
  • En el mar, destacan por su cantidad los derrames de petróleo y los plásticos

Los océanos, mares y ríos del mundo acumulan hoy 140 millones de toneladas de plásticos109 en los ríos y el restos, 31 en mares y océanos, según el informe internacional presentado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).

Agua

Preservar el agua es una prioridad.

Contaminación de la tierra

La contaminación de la tierra está de forma directa unida al agua, pero residuos y sustancias dañinas para la salud en muchos casos si no se tratan correctamente y con rapidez, quedan acumuladas de forma permanente y perpetua.

Es un proceso de degradación química que consume los suelos fértiles, puede ser invisible a los ojos humanos, pero compromete los alimentos que comemos, el agua que bebemos y el aire que respiramos.

Huella humana

La mayoría de los contaminantes tienen su origen en las actividades humanas y se liberan en el medio ambiente debido a prácticas inadecuadas de producción, consumo y eliminación, como las prácticas agrícolas insostenibles, los procesos industriales y la minería poco respetuosos con el medio ambiente, así como la gestión deficiente de los residuos.

Desde principios del siglo XXI, la producción anual mundial de productos químicos industriales se ha duplicado hasta alcanzar alrededor de 2 300 millones de toneladas y se prevé que aumente un 85% para el 2030.

Los patrones de producción y consumo modernos basados en la rápida obsolescencia de los productos, han llevado a una incesante producciónde residuos y a la excesiva extracción de materias primas.

La mayoría de las emisiones de contaminantes al suelo no son fáciles de cuantificar y, por consiguiente, siguen siendo muy inciertas. Los contaminantes industriales se liberan al medio ambiente a lo largo de su ciclo de vida, desde la fabricación hasta la producción de los materiales que contienen contaminantes, su transporte, uso y eliminación.

Montañas

Los contaminantes llegan hasta altas montañas como los Alpes.

El mundo produce más de 2.000 millones de toneladas de residuos sólidos al año, según figura en el último informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); y seguro que no están todos contabilizados. A esa cifra habría que sumar unos miles más.

La agricultura insostenible es una de las principales causas de la contaminación del suelo y también tiene un gran impacto en el cambio
climático. En 2018 se aplicaron en todo el mundo unos 109 millones de toneladas de fertilizantes nitrogenados sintéticos.

El exceso de nitrógeno altera los ciclos biológicos del suelo y se libera a laatmósfera en forma de N2O, lo que provoca emisiones de 700 000 de CO2 equivalentes.

En 2017, las emisiones agrícolas representaron el 20% de todas las actividades humanas.

¿Qué puedes hacer?

Consumir alimentos que provengan de la agricultura ecológica, generar los menos residuos posibles, usar medios de transporte sostenibles para los desplazamientos, utilizar productos naturales a diario para nuestra higiene y de nuestro hogar, dejar de usar plásticos de un solo uso…son solo algunos ejemplos de lo que podemos hacer desde nuestras casas, pero además participar activamente promoviendo la información para que los cambios en favor del medio ambiente se lleven a cabo.

Desaparición de la vida silvestre

El conflicto entre humanos y vida silvestre, junto con otras amenazas, ha provocado una disminución significativa de especies que alguna vez fueron abundantes, y especies que son naturalmente menos abundantes han sido llevadas al borde de la extinción.

El Índice Planeta Vivo 2020 de WWF (IPV) hace un seguimiento de la abundancia de casi 21.000 poblaciones de mamíferos, aves, peces, reptiles y anfibios en todo el planeta.

Así se ha podido constatar un desplome medio del 68% en las poblaciones analizadas de mamíferos, aves, anfibios, reptiles y peces entre 1970 y 2016.

Se sabe que el factor más importante que ha provocado de forma directa una mayor pérdida de la biodiversidad en los sistemas terrestres en
las últimas décadas ha sido los cambios en los usos del suelo, quehan convertido hábitats autóctonos originales en tierras de cultivo; además, una gran parte de los mares han sido sobreexplotados.

La biodiversidad desempeña un papel crucial para el aprovisionamiento de comida, fibra, agua, energía, medicinas y otras materias primas, por lo que resulta clave para la regulación de nuestro clima, calidad del agua, contaminación, servicios de polinización, control de inundaciones y de grandes mareas.

De hecho, el resultado más impactante a escala planetaria es la reducción del 94% en el IPV de las subregiones tropicales del continente americano.

La alteración de praderas, sabanas, bosques y humedales, la sobreexplotación de especies, el cambio climático y la introducciónde especies exóticas constituyen las principales amenazas.

IPV

Índice Planeta Vivo: gráfica con los estados de las cinco zonas investigadas.

Las 3 471 poblaciones evaluadas por el Índice Planeta Vivo de Agua Dulce (que representan a 944 especies de mamíferos, aves, anfibios, reptiles y peces) han disminuido una media de 84% (entre el -89% y el -77%), equivalente al 4% anual desde 1970.

La mayor parte de estas pérdidas se están dando entre los anfibios, reptiles y peces de agua dulce en todas las regiones del planeta, pero especialmente en Latinoamérica y Caribe.

¿Qué puedes hacer?

Pasrte a la acción y movilizarte cuando veas que zonas naturales están siendo agredidas de forma impune. Es la única vía. Somos muchos y con muchos ojos. Todos podemos vigilar nuestro entorno más cercano para asegurar su supervivencia.