Los aceites de masaje bio para el deporte son los recién incorporados a la cosmética diaria. De la misma manera que usamos una crema para hidratar la piel o un desodorante para la transpiración, los aceites de masaje bio se han convertido en los imprescindibles para antes y después del ejercicio.

Prevenir, antes que curar

Y es que realizar cualquier deporte ya supone un esfuerzo extra para nuestro cuerpo. Por ello, tratamos de alimentarnos lo mejor posible y tomar algunos suplementos para no decaer durante el tiempo que realizamos, además de procurar tener a puntos nuestros musculos para los impactos que se producen.

Es fundamental y prioritario realizar un calentamiento antes de comenzar a practicar el ejercicio y mantener un entrenamiento semanal, sin forzar el cuerpo hasta el límite.

Siempre es mejor ir poco a poco hasta encontrarnos seguros con la tabla o circuito que practicamos, para después pasar al siguiente nivel.

Las prisas nunca han sido buenas consejeras, por lo que intentaremos empezar con suavidad para ir de forma paulatina llegando a una mayor intensidad, sea cual sea el deporte que hagamos.

Así, nos evitaremos las temidas lesiones deportivas, que nos pueden dejar de baja durante unos cuantas semanas o meses. Controlar cada músculo, cada posición, es elemental. 

Aceite de masaje bio, un descubrimiento

Antes de vestirnos con la ropa deportiva, lo ideal sería prevenir las contracturas o tirones aplicándonos un aceite de masaje por las partes del cuerpo que más sufren con el ejercicio que realizamos.

El Aceite de masaje bio SOS Flex Arnica & Gaulteria de Puressentiel (una marca 100% familiar y 100% internacional) ayuda a que ese tipo de lesiones deportivas no se produzcan, gracias a sus maravillosa fórmula que contiene Arnica montana y gaulteria.

Estos dos ingredientes funcionan como potentes antiinflamatorios y analgésicos para contusiones, magulladuras, tendinitis y distensiones musculares, entre otros. Son sumamente eficaces para dolor de origen musculoesquelético.

El salicilato de metilo, que contiene el aceite esencial de gaulteria, es una estructura muy parecida a la de la aspirina, por eso es frecuentemente utilizado por masajistas, fisioterapeutas u osteópatas.

Ingredientes elegidos a conciencia

La fórmula se complementa para ser más eficaz con aceite esencial de lavanda, aceite esencial de eucalipto, aceite esencial de enebro, aceite esencial de romero, extracto de ulmaria y extracto de capsicum. El 100% de sus ingredientes son provenientes de la agricultura ecológica certificados por ECOCERT.

Todos ellos actúan relajando la tensión muscular, contra la inflamación y el dolor, siendo analgésicos y antiinflamatorios de forma tópica. 

Aplicación del aceite de masaje

Se deben usar unas cuantas gotas de aceite, aplicándolas con suavidad por las zonas más propensas a las lesiones, hasta que se hayan absorbido en su totalidad.

Presentado en un envase con dosificador para evitar malgastar el valioso producto que contiene, el Aceite de masaje bio SOS Flex Arnica & Gaulteria tiene una textura no grasa, por lo que el producto se absorbe de forma rápida, sin sensación pegajosa. Se puede también aplicar después del ejercicio.

Me gusta el aroma que desprende, y como se queda la piel después de cada aplicación. Ha sido una sorpresa, un descubrimiento que utilizo siempre que hago ejercicio, porque cualquier crema corporal no basta para calmar las inflamaciones.