Los pistachos son un tipo de frutos secos de los que se conocen alrededor de 20 variedades de especies, que se diferencian fundamentalmente en su color, sabor y tamaño.

Día Mundial del Pistacho

El 26 de febrero se celebra el Día Mundial del Pistacho, y no podemos dejar de recomendar su consumo sabiendo todos los beneficios que procuran a nuestro organismo.

El país que más produce pistachos es Irán seguido por Estados Unidos y Turquía. La planta Pistacia vera, crece en terrenos en donde hay grandes contrastes térmicos, pero no resiste bien la humedad. Le gustan más las altas temperaturas, por lo que la cuenca mediterránea oriental a sido su punto de origen.

Beneficios del consumo de pistachos

Los beneficios para la salud de los frutos secos, principalmente en relación con la mejora de condiciones dismetabólicas como se ha descubierto en distintas investigaciones médicas como la obesidad, la diabetes mellitus tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares relacionadas, han sido ampliamente demostrados.

Pero también se ha visto que influye en otras enfermedades como el cáncer, la hiperlipidemia, o incluso, la disfunción eréctil, según distintos artículos.

Ricos en multitud de nutrientes

En comparación con otros frutos secos, los pistachos tienen un contenido graso y calórico más bajo, y contienen los niveles más altos de ácidos grasos insaturados, potasio, γ-tocoferol, fitoesteroles y xantofilas carotenoides, todas sustancias que son bien conocidas por sus acciones antioxidantes y antiinflamatorias.

Esta variedad de nutrientes contribuye al creciente cuerpo de evidencia de que el consumo de pistachos mejora la salud, lo que lleva a un mayor potencial de actividad saludable antioxidante y antiinflamatoria, control glucémico y función endotelial.

Los pistachos son una buena fuente de numerosos antioxidantes, incluyendo tocoferoles, carotenos, luteína, selenio, flavonoides y fitoestrógenos, que son fuentes importantes de vitamina A.

• Los flavonoides, una subclase de fitoquímicos, constituyen una gran grupo de constituyentes de los alimentos, muchos de los cuales alterar los procesos metabólicos y tener efectos positivos impactos en la salud.
• Los pistachos son una gran fuente de fitoesteroles con lo que ayudan a la inhibición de la absorción de colesterol, la disminución de las concentraciones de colesterol total y colesterol LDL, con efecto antiinflamatorio, antitumoral, bactericida y fungicida.
• También son ricos en vitamina B6, lo que contribuye a mantener un sistema nervioso saludable y un buen desarrollo cerebral, así como un sistema inmunitario fuerte.
• La luteína y la zeaxantina, así como los carotenos procuran una buena vista, y los tocoferoles colaboran para el funcionamiento de los músculos y de los nervios de forma óptima, previniendo la formación de coágulos y apoyando la inmunidad.
• Las isoflavonas son fundamentales para la mujer en torno a la menopausia para corregir los desequilibrios hormonales, pero también se sabe de su influencia en la fortaleza de los huesos o en obstaculizar el desarrollo del cáncer.
• También están presentes en su composición los ácidos grasos insaturados (ácido linoleico, linolénico y ácido oleico) que son esenciales para el cuerpo. En especial, son de manera indiscutible los que proporcionan una prevención frente a problemas cardiovasculares, pero también en el control de la diabetes.
• Algunos estudios han encontrado eriodictiol y antocianina en pistachos. Unas sustancias que potencian los efectos anticancerígenos, refuerzan el sistema cardiovascular, ayudan frente a la arteriosclerosis y en la hipertensión, bajan el colesterol en sangre, o contribuyen a una visión óptima.

¿Cómo tomar pistachos?

Con todas estas cualidades, no dudes en incluir un puñado de pistachos en tu dieta diaria. Solo con eso te aprovecharás de todas esas virtudes. Procura consumirlos sin sal, o quitarla antes de ingerirlos.

También puedes elaborar platos con ellos, aunque lo ideal es tomarlos solos como un tentempié energético, que no engorda, según distintos estudios científicos. De hecho, sacian y evitan que se aumente la ingesta de otras calorías bajas en nutrientes. 

Como siempre, recuerdo adquirirlos si es posible de producción ecológica, para que se mantengan todas las cualidades organolépticas completas, sin sustancias químicas que hagan el efecto contrario a lo que necesitamos o queremos.