La granada proviene del espinoso árbol del granado (Punica granatum), una especie que puede llegar a medir 5 m de altura y que su origen se remonta a las tierras de Irán, aunque ya se cultiva en prácticamente todos los continentes con hábitats templados o subtropicales. Se caracteriza el fruto del granado por tener una forma esférica y ser de color amarillo-rojizo. En su interior se encuentran unas maravillosas «perlas» o granos semitransparentes que contienen una gran cantidad de compuestos beneficiosos para la salud.

Granada

El fruto de la granada tiene una cáscara muy dura, generalmente de color rojizo.

Se cultivan diferentes especies en todo el mundo, pero en España la más conocida que además tiene el sello de Denominación de Origen Protegida, es la Granada Mollar de Elche. El chef Quique Dacosta, 3 estrellas Michelín; afirma que la “granada mollar es el caviar vegetal». La granada es un símbolo de fertilidad, amor y prosperidad. En la iconografía ha sido una de las frutas más empleadas, en cualquiera de las culturas y religiones. La granada aparece en el propio escudo de España.

Alrededor del mes de octubre comienza la temporada de granada, por lo que es importante aprovechar este tiempo de otoño para prevenir los achaques de la época fría que se aproxima, tomando varias granadas a la semana. Están deliciosos los granos con ensalada, incluso solos, añadiendo algún endulzante natural: lo mejor es dejarlos macerar con un chorrito de limón y miel.  Puedes adquirir las granadas sin ningún tipo de químico añadido en su crecimiento, ni en las tierras donde se ha cultivado, provenientes de la agricultura ecológica.

 

¿Cuáles son las poderosas propiedades de la granada para la salud?

Propiedades antioxidantes

Contiene propiedades antioxidantes como son algunas especies de flavonoides y antocianidinas, mostrando una actividad antioxidante tres veces mayor que el extracto de té verde. Los estudios científicos han analizado los efectos beneficiosos de la actividad antioxidante de las granadas in vivo e in vitro y han demostrado que el consumo de jugo de granada provoca una disminución en la activación de procarcinógenos por actividad, protección de la mucosa gástrica, protección del cerebro en casos de hipoxia, reducción de la SG hepática y efectos protectores contra UVA y UVB. 

El estrés oxidativo produce metabolitos tóxicos que pueden iniciar y promover cánceres, de ahí la importancia del consumo de polifenoles y flavonoides.

Otros estudios también han demostrado los efectos protectores de la granada en el sistema cardiovascular, incluida la reducción del colesterol LDL, en la acción antihipertensiva y en la reducción de la estenosis arterial carotídea. Además, se recomienda como parte de una dieta saludable para el corazón.

Granada

Los granos de la granada son auténticas «bombas» antioxidantes.

Propiedades antiinflamatorias

Se ha demostrado que la granada inhibe la inflamación por diferentes mecanismos: la ciclooxigenasa y la lipooxigenasa, que son enzimas clave en la conversión del ácido araquidónico en prostaglandinas y leucotrienos (mediadores inflamatorios importantes), respectivamente, son inhibidas por la granada.

También se  ha comprobado, que la granada tiene un efecto inhibidor de la destrucción articular significativo sobre la osteoartritis, y es sumamente eficaz en la artritis reumatoide; actuando de forma potente en la fibrosis del hígado.

Propiedades anticancerígenas

La granada posee efectos inhibidores sobre diferentes tipos de cánceres tales como cáncer de próstata, cáncer de mama, colon y cáncer de pulmón. 

El éster fenetílico del ácido cafeico, un compuesto de la granada que también deriva del propóleo de abeja, ha mostrado disminuciones en las células del fibrosarcoma humano. Es un un potente agente antimetastásico.

Otros efectos de su consumo

Un estudio reciente ha demostrado la capacidad de la granada para inhibir el desarrollo de nuevos vasos sanguíneos, que es esencial en el suministro de oxígeno y nutrición para el crecimiento tumoral y la progresión de los cánceres.