Todos estamos notando el aumento de los precios a la hora de adquirir productos básicos de alimentación. Para muchas familias supone un verdadero quebradero de cabeza poder comer a diario de forma saludable, sin caer en la comida basura procesada, mucho más barata, pero llena de inteligibles ingredientes, que despiertan cuanto menos una cierta preocupación.

Ya se está comprobando que en muchos hogares no pueden llegar a fin de mes, incluso trabajando dos adultos con varios hijos a su cargo, sobre todo si tienen que pagar mensualmente gastos fijos elevados como una hipoteca o el alquiler de una casa, sin tener en cuenta otros cargos adicionales de los mismos, como el importe de la luz, el gas, o los diferentes impuestos, entre otros.

Mientras se espera que los políticos actúen para que las «colas del hambre» (que se pueden observar en muchos organismos, para simplemente poder volver a casa con algo que llevarse a la boca), desaparezcan o al menos se reduzcan en muchas ciudades, hay numerosas acciones que podemos llevar a cabo para ahorrar en la cesta de la compra y degustar alimentos que de otro modo terminarían en la basura

Productos con descuento por la fecha de caducidad

Muchos establecimientos comerciales revisan a diario sus productos para rebajar aquellos que tienen una fecha de caducidad cercana o están a punto de caducarse. En muchos casos, el descuento casi llega a un 50%, por lo que podemos ahorrar unos cuantos euros para otros gastos.

Foto de vitalina

En la pescadería escoge pescado que puedas repartirlo bien entre los componentes de tu hogar. Foto de Vitalina.

Estos alimentos rebajados suelen ser frescos, como carne o pescado, pero también frutas y verduras, yogures, pan, embutidos, etc.; por lo que siempre es posible realizar un guiso consistente con los productos encontrados, con el que pueda comer toda una familia de cuatro miembros.

Para ello es necesario consultar en cada tienda, cómo se lleva a cabo y cuándo, para no llevarnos una sorpresa desagradable, ya que suele ser a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde cuando echan el cierre.

Foto de Tima Miroshnichenko

Cuando vayas a comprar compara bien los precios y elige solo lo que vayas a consumir. Foto de Tima Miroshnichenko.

Aplicaciones móviles para comprar comida que se va a desechar

Además, existen distintas aplicaciones a las que podemos acceder mediante un dispositivo móvil, y en las que podemos encontrar restaurantes, tiendas, o supermercados, entre otros, que para no desperdiciar comida, la ofrecen a un precio muy reducido (dependiendo del sitio puede haber más o menos variedad y cantidad de lotes), o incluso algunas aplicaciones, te ayudan a realizar un menú con aquellos productos que tengas en casa, y no sabes bien cómo cocinarlos para aprovecharlos al máximo.

Puedes pagarlo con el propio móvil y luego ir a recogerlo al sitio físico. Debes revisar que sea un lugar cercano a tu trabajo o a tu hogar para que no despilfarres tiempo y energía.

Apoyo en redes locales

Pero aparte, puedes desde tu empleo o desde tu zona de residencia organizar algo similar para aquellas personas necesitadas, cuando veas que no vas a consumir algunos alimentos que compraste, y que no se encuentren en mal estado. Las redes locales pueden ayudar a muchas personas para que no mueran de hambre. 

Organización, nunca falla

Otra forma de ahorrar para llegar a fin de mes es cocinar distintos platos y guardalos en recipientes en la nevera o en el congelador con la comida justa que vaya a consumir la familia, para que no quede nada desperdiciado.

Eligiendo siempre las ofertas del día que suelen establecer muchos comercios, pero mirando que no sean engañosas, también es posible dejar de gastar unos cuantos euros.

Ante todo, hay que pensar e invertir un tiempo en saber elegir los distintos alimentos para que sea una comida nutritiva, como por ejemplo empezar a cocinar nuevas verduras que han quedado descartadas en los últimos tiempos por otras más comerciales, pero que son más baratas y ricas en vitaminas. También puedes leer  el artículo 10 consejos para no desperdiciar comida.