Ikea ha obtenido las certificaciones de ASC y MSC para el pescado y el marisco que vende en sus tiendas y restaurantes en todo el mundo. De esta forma, el gigante sueco asegura a sus clientes la sostenibilidad de sus productos alimenticios y transmite el mensaje del respeto por el planeta y sus recursos.

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Los certificados de Aquaculture Stewardship Council (ASC) y Marine Stewardship Council (MSC) aseguran que los productos han sido obtenidos de forma sostenible y responsable. Esto supone que no se sobreexploten las especies, que se cuide el medio ambiente durante todo el procesado de los alimentos y que se respeten los derechos de los trabajadores y los intereses de las comunidades locales.

Ikea quiere mostrar así su compromiso con una alimentación sana y saludable, pero también sostenible y respetuosa con el medio ambiente y los recursos pesqueros. Estos logros se enmarcan en la estrategia People & Planet Positive, gracias a la cual la compañía escandinava trabaja mano a mano con sus proveedores para conseguir beneficios para el planeta, aprovechar al máximo sus recursos y mejorar el día a día de las personas implicadas.

La multinacional sueca dispone ahora de una oferta de 23 especies certificadas, entre las que incluye sus productos estrella, tanto por la tradición de Suecia como por los gustos de sus clientes, como son el salmón, los arenques y las gambas. Al mismo tiempo, Ikea expande su negocio de alimentación a otros mercados como Turquía, Tailandia y Oriente Medio.

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Ikea se compromete con la sostenibilidad de sus pescados y mariscos. Desde la empresa destacan la responsabilidad con respecto a “toda la cadena de valor, desde las granjas y la industria pesquera” hasta la certificación de los propios restaurantes. Además, se congratulan del respeto a las condiciones laborales de los trabajadores que hacen posible la obtención responsable y sostenible de estos productos marinos. Así lo expresa Michael La Cour, director global de Ikea Food Services AB.

Uno de los efectos deseables de este compromiso con el medio ambiente por parte de una compañía tan popular como Ikea, que surte de productos la gran mayoría de nuestras casas (quién no tiene, como mínimo, unos vasos, una colcha o unas velas, si no un mueble, en su hogar) es que el mensaje del respeto por el medio ambiente cale entre sus clientes.

La acuicultura ecológica y la pesca sostenible son vitales para el mantenimiento de los caladeros mundiales, y el apoyo de grandes multinacionales como Ikea es importantísimo. El mensaje de la sostenibilidad puede llegar así a millones de consumidores e instarlos a buscar los sellos de ASC y MSC cada vez que compren pescados o mariscos. Al fin y al cabo, la presión de los consumidores es lo único que puede llevar a las grandes empresas a actuar de forma responsable y sensata con el planeta y sus recursos.

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