Los alucinantes canales de Copenhague, capital de Dinamarca, ahora se pueden recorrer a bordo de novedosos barcos de plástico reciclado y energía solar. Creados a partir de botellas de plástico recicladas y con baterías que se recargan en una central con paneles solares, en la que también es posible adquirir productos ecológicos para organizar un picnic mientras se navega. Una experiencia única que seguro va formar parte del nuevo turismo por la ciudad, una forma de desplazarse más sostenible sin repercusiones tóxicas para el Medio Ambiente.

Fotografía de Lloyd Alter

Su diseño ha sido creado por Carl Kai Rand para proporcionar comodidad, conversación y seguridad, mientras se surcan los canales tomando una deliciosa comida orgánica en una mesa de picnic flotante con capacidad para diez personas. Un invento eco-friendly que podría traspasar fronteras para hacer la vida más cómoda en otras partes del mundo.

Estos barcos que se alquilan con la empresa GoBoat, pueden ser manejados por cualquier persona, no hace falta tener el carnet para conducirlos, ¡ahora sí puedes ser capitán de tu propio barco! No os penséis que van a gran velocidad, su rimo natural es lento para poder comer tranquilamente y a la vez observar la maravillosa urbe desde otro punto de vista.

La mesa de cada barco y la propia central donde se alquilan están realizadas con madera Kebony de origen local, un tipo de madera muy resistente y dura, que constituye una opción más sostenible a la explotación de las maderas tropicales, ya que proviene de  la utilización de líquidos a partir de residuos biológicos. Por ello, es perfecta para aguantar las inclemencias meteorológicas del aire libre, el paso del tiempo le proporciona un aspecto grisáceo, aunque su color original es oscuro. Su duración es tres veces mayor que la madera tratada más resistente, así que no hay duda a la hora de elegirla si se quiere prolongar la vida de un objeto.