Los desodorantes son los cosméticos que actualmente se encuentran en el punto de mira. ¿Por qué?. La respuesta es sencilla, por la cantidad de sustancias químicas dañinas que maquivélicamente la industria cosmética ha querido incorporar a sus composiciones, presuponiendo la ignorancia de sus consumidores, para abaratar los costes, y ganar más. Pero, gracias a Internet muchos han dado con la verdad, esa que les estaban negando las grandes marcas; y aún así, ¿sigues usando el mismo desodorante de toda la vida?. Pues, te estás intoxicando lentamente, sin darte cuenta. La piel es el órgano más extenso que tenemos y por él también penetran los tóxicos que van a parar al torrente sanguíneo, especialmente en zonas delicadas donde están los ganglios linfáticos.

Por esta misma razón, he descubierto hace un tiempo un desodorante que me ha cautivado por su fresco aroma. Huele entre menta y limón, con sistema roll-on y con certificado ecológico de Cosmetique Bio. Los laboratorios Paltz son los creadores de este fantástico producto de la marca Esenka , que deja respirar nuestras axilas, y a la vez las protege y desodoriza. Sus aceites esenciales de Pino Silvestre, Lavandín y Salvia ayudan a proteger la epidermis y neutralizan las bacterias responsables del mal olor. El aceite esencial de menta, y el aceite de almendra junto con el sésamo, dan el toque final a un cosmético de alta calidad y precio excelente; y por supuesto, sin alcohol.

Se podría comparar con la famosa piedra de alumbre, pero de esa ya hablaré más adelante, también por sus múltiples beneficios. Y lo más importante, ¿tienes hijos pre-adolescentes o adolescentes?, no dejes de utilizar productos naturales para su higiene ahora que sus hormonas están más alteradas y su cuerpo está creciendo, ¡mucho cuidado con lo que se echan!. Además, de productos desodorizantes, necesitan más higiene de lo normal por la mayor producción de sebo en las distintas partes del cuerpo. Un consejo que no debes de pasar por alto.