La quinta edición de BioCultura Bilbao, celebrada este fin de semana en BEC, se ha convertido en el centro neurálgico del sector ecológico vasco, contribuyendo con la feria a que la tendencia al alza del sector siga siendo una realidad incuestionable en Euskadi.

BioCultura Bilbao 2018

BioCultura Bilbao ha reunido a diferentes tipos de productores de Euskadi y de todo el estado español. Agricultores y ganaderos vascos reunidos bajo el paraguas de ENNEK (el comité certificador vasco), almazaras y bodejas riojanas o andaluzas, empresas de ecocosmética de todo el estado, firmas de textil sostenible, asociaciones de terapias complementarias…

BioCultura como medio de información para los consumidores

Para Ángeles Parra, directora de BioCultura, «la cita en BEC ha demostrado una vez más que este mundo le llega ya a cada vez más personas y no sólo a una minoría concienciada. Son muchos los intereses de grandes corporaciones y de lobbies de diversos ámbitos (el farmacéutico, el energético, el agroalimentario…) que se oponen al crecimiento del mundo ecológico, pero esto ya no hay quien lo pare. Ahora bien, este universo, aún embrionario, necesita ferias potentes como BioCultura y llegar a los medios de información para que los consumidores conozcan de cerca todas las virtudes de los alimentos ecológicos, que son la mejor forma de prevenir muchísimas enfermedades, porque, al fin y al cabo, somos lo que comemos».

Cosmética ecológica y el mundo vegano

Dentro del universo ecológico se observan varias subtendencias. Una de ellas es el crecimiento de la cosmética ecológica certificada.

«Las grandes empresas del sector cosmético convencional disfrazan de ‘verdes’ sus productos, pero contienen elementos peligrosos para la salud de los consumidores y de la Tierra. En BioCultura, toda la cosmética ecológica y natural está certificada».

Por otro lado, el mundo vegano no deja de crecer y también los productos gourmet que son ecológicos. Parra señala que «los alimentos orgánicos están elaborados de una manera que los convierte en alimentos de alta gama. Los gourmets ven en estos alimentos que salud y sabor no son incompatibles». El universo ecológico está creciendo y las grandes superficies han visto un «nicho de mercado» interesante.