Mañana, 17 de abril se conmemora el Día Mundial de la Lucha Campesina. La razón de este día y no otro es, porque en este mismo día, pero en el año 1996 fueron asesinados en la localidad de El Dorado dos Carajás, en el Estado de Pará, diecinueve campesinos del Movimiento Sin Tierra de Brasil; a manos de la  policía militar brasileña. En esta masacre hubo cientos de heridos, y 69 sufrieron diversas mutilaciones. Y lo peor fue, que al menos 10 fueron ejecutados extrajudicialmente, después de que se entregaran.

Algo inverosímil, pero que todavía sigue ocurriendo en muchas partes del mundo. Este combate que se sigue batallando por el desarrollo del mundo rural, continua siendo una lucha entre un David y un Goliat, en el que las grandes compañías van menospreciando al pequeño agricultor, quitándole del medio para que no estorbe y no de problemas. Primero, con las famosas semillas y sus patentes, las plantas transgénicas y todo lo que conllevan. Segundo, con los cultivos monopolizados en dónde no hay lugar para los insignificantes campesinos. Tercero, con la compra de las tierras. Expropiación y especulación definen mejor lo que está sucediendo con nuestros campos de cultivo. Cuarto, con el robo de un agua que nos pertenece a todos y que están contaminando sin ningún escrúpulo. Hay un quinto, un sexto, un séptimo,…pero no tenemos tiempo que perder.

Por ello, debemos levantarnos para luchar por nuestra soberanía alimentaria, nuestro futuro pasa por saber lo que nos comemos con cada cuchara que nos metemos a la boca. Debemos proteger nuestra tradición y nuestros sembrados, ¡que no nos quiten lo que es nuestro, que no nos envenenen!.

Aquí os dejo algunas de las actividades que ya se están desarrollando en nuestro país, para poder frenar esta barbarie alimentaria, que mata nuestro medio ambiente y nuestra salud.

Semana de la Lucha Antitransgénica, la Soberanía Alimentaria y la Vía Campesina