¿Qué clase de ser humano ha emitido dicha autorización? Esta fue la pregunta que me hice al enterarme de la noticia, y no, no es una broma.

La Consejería insular del Área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife ha autorizado que un grupo de cazadores abata a 15 perros abandonados que malviven en los alrededores de “Los Cristianos”, pretendiendo justificarlo acogiéndose a la Ley 7/1998, de 6 de julio, de Caza de Canarias, considerando a los perros asilvestrados en lugar de abandonados, lo que contradice la Ley 8/1991, de 30 de abril, de Protección de los animales. Además, el texto firmado por la Consejera Guadalupe Mora es incoherente en algunos de sus aspectos, ya que en algunos momentos se habla de perros violentos, mientras que más adelante se afirma que la decisión tomada es debido a que no han podido ser capturados por la falta de medios (sin especificar nada más) y porque esos perros huyen de las personas.

¿No será que no lo han intentado lo suficiente? Si para hacer el seguimiento de determinados animales salvajes les disparan dardos tranquilizadores, ¿por qué no pueden hacer lo mismo con los perros?

Esta decisión tomada por la Consejería de Tenerife, bajo mi punto de vista, no sólo es un gran error, sino una auténtica barbaridad. Esos pobres perros no tienen la culpa de haber tenido unos dueños irresponsables que no se preocuparon por ellos y que un día decidieron dejarlos a su suerte.

Que se sepa, aún no se ha establecido cuando se cometerá semejante atrocidad, así que si tú también quieres evitarlo, un dudes en escribirles tu opinión a través de su buzón de sugerencias o mediante la firma de la petición para que no sigan adelante.

¿Qué será lo siguiente? ¿Disparar a los vagabundos de la calle?

Fuentes: Change.org, PACMA. Fotografía: ABC Sevilla.