Neha Juneja, una emprendedora de 27 años de Bombay,  junto a un amigo vio una oportunidad de negocio en la India rural. En un pueblo de Maharahstra puso a prueba un aparato que espera le de beneficios, el Greenway Grameen Infra, una cocina ecológica.

«Es un aparato muy simple», explica la joven. «No la diseñamos en un laboratorio, empezamos con un prototipo abstracto y viajamos alrededor de India durante nueve meses para entender qué es lo que quieren los lugareños, tratando de no cambiar sus hábitos culinarios».

El artefacto se diseñó con un componente que automáticamente absorbe el oxígeno del exterior y lo proyecta hacia el combustible para asegurarse de que esta combustión sea eficiente y limpia.

Cientos de millones de indios todavía preparan su comida como se hacía hace siglos: con viejas estructuras de barro, cuyo humo emite gases con efecto invernadero, pero los campesinos de India están poco a poco empezando a utilizar cocinas ecológicas que consumen menos leña y generan menos humos.

Investigadores de la Iniciativa Nacional India para el Desarrollo de Cocinas de Biomasa Avanzadas, estiman que más del 4% de las emisiones de gas con efecto invernadero en el país provienen de esta práctica.

El sistema desarrollado por Juneja puede ahorrar el uso de leña y disminuye en unas dos toneladas las emisiones de gases derivados de la preparación de comidas al año.

«Es mejor porque usa menos leña», dice Saku Bhala, quien vive en un pueblo y ha empezado a usar una de las cocinas, y «no hace arder mis ojos ni mi cuerpo».

«Yo diría que hay mucho dinero en el negocio de la energía verde en India porque las soluciones que se están hallando resuelven problemas básicos de infraestructura, que serían difíciles de resolver de otro modo», finalizó Juneja, quien ya ha vendido más de 6.000 cocinas desde que la cocina se lanzó a la venta a principios de este año.

De hecho están siendo tan populares, que en la sureña región de Karnataka, se entregan como regalo de boda.

Fuente: BBC Mundo