Llegan las vacaciones de Navidad, y muchas personas aprovechan para dedicarse a otras actividades, que durante la vida diaria no pueden realizar por cuestión de tiempo.

La mayoría de los urbanitas viven de acuerdo a unos horarios establecidos y rígidos, que en muchas ocasiones hace que no sean conscientes del estado de su mente y de su cuerpo.

Una gran parte de la población está atada a unas rutinas diarias inamovibles y a hábitos poco saludables, que les lleva a una existencia errante.

Qué podemos hacer para reconectarnos con la naturaleza

La contemplación de un bello paisaje mejora el estado anímico.

Un círculo vicioso de casa al trabajo y viceversa, con lo que no consiguen llevar una vida de plenitud en la que todas sus facetas estén completas y rellenas.

Algo complicado de gestionar, pero que se puede solucionar con una buena planificación del tiempo libre. Ahora que llegan las vacaciones de Navidad es el momento de establecer esos nuevos planes futuros, pero también es época de disfrutar con los nuestros y dejar espacio para reconectarnos con la naturaleza y nuestro yo más profundo.

8 claves para reconectar con la naturaleza

1. Disfruta viendo amanecer

Ya sabemos que madrugas mucho, pero estos días intenta levantarte con el sol. Intégrate con tu reloj biológico, para que los ritmos circadianos que gobiernan en la naturaleza, también lo hagan con tu organismo.

2. Aprende a respirar conscientemente (pranayama)

Observa tu respiración. Es la forma de establecer tu conexión con el exterior. Tu mente y tu cuerpo físico dependen de ella. Si tienes una mala respiración, superficial, puede ser que tus órganos no funcionen como deberían, y tus conexiones cerebrales sean débiles. Comienza a realizar respiraciones profundas a diario. Hay multitud de ejercicios para poder ejercitar, y que influyen en tu aprendizaje, tu atención y tu memoria.

3. Ejercicio al aire libre

Si estás demasiado tiempo delante de la pantalla del ordenador o metido entre cuatro paredes muchas horas cada día, no puedes dejar de practicar ejercicio al aire libre en estos días de asueto. Puedes practicar yoga, meditación o realizar otras actividades deportivas más movidas, como el senderismo o el trekking. Para el yoga o la meditación debes tener ropa ligera que no estorbe, pero abrigada si estás en un sitio más frío. Para caminar por el campo es necesario un buen equipo con abrigos poco voluminosos y abrigados, pantalones a prueba de viento y roces, y zapatillas deportivas tipo air max 90.

Qué podemos hacer para reconectarnos con la naturaleza

Caminar por el sendero de un bosque es beneficioso para la salud.

4. Observa la naturaleza

Párate a contemplar un paisaje: como se mueven las nubes, como desaparece la niebla, como vuelan las aves, como discurre el río…¡seguro que no sabías que había tanta belleza tan cerca! Desconecta de tus pensamientos y simplemente observa lo que pasa a tu alrededor. Siente la paz y la energía que transmite. Fúndete con el espacio natural. ¡La madre naturaleza está en ti y en todo lo que te rodea!

5. Pies en tierra

La mejor forma de reconectarte con la naturaleza es caminar descalzo por la hierba, la arena, la tierra o la piedra. En realidad, deberíamos caminar descalzos siempre que podamos, por ejemplo, en casa. Pero si tienes ese tiempo libre para desplazarte algún sitio cercano en estos días, no te lo pienses, y quítate los zapatos un rato. Es la más efectiva manera de establecer de nuevo tus lazos con el universo, por si alguna vez has pensado que no formabas parte de él. Un pequeño gesto que mejorará tu estado de ánimo y tus dolencias.

6. Cultivar plantas

Si todavía no tienes plantas en casa, es el momento de adquirir algunas y dedicarles un rato todos los días. La jardinería es un actividad muy placentera con la que además de cultivar plantas, cultivas otras cualidades personales como la paciencia, la seguridad, la responsabilidad, la autoestima, la creatividad… y un largo etcétera. Puedes incluso, crear un pequeño huerto para abastecerte de verduras, y si tienes más espacio, incluso frutales. ¡Las plantas son un pequeño trozo de naturaleza en nuestro hogar y una alimentación orgánica equilibrada es la clave de una buena salud! 

7. Interactuar con animales

Intenta establecer contacto con animales. Son seres vivos como nosotros a los que debemos observar su manera de reaccionar ante los acontecimientos y su comunicación con los de su misma especie. ¡Aprenderemos mucho de ellos! Ellos se enfrentan a las vicisitudes de la existencia con mucho valor y entereza, deberíamos tomar nota de sus reacciones y de su instinto de supervivencia. El hecho de echarle coraje y salir airoso forma parte de su instinto de supervivencia, pero si algo se tuerce, siguen adelante sin mirar atrás.

Qué podemos hacer para reconectarnos con la naturaleza

Observar la puesta de sol de forma consciente ayuda al organismo a regular el reloj biológico.

8. No te pierdas la puesta de sol

Para finalizar el día, no puedes dejar de contemplar una bellísima escena: la puesta de sol. Cada jornada es un regalo. Por eso, el atardecer es el momento de dar las gracias por haber pasado otro día más sobre la faz de la Tierra. Otra nueva oportunidad de aprender y reaprender. De resolver los problemas, de crecer ante la adversidad, de sentirnos dichosos, de estar a gusto con nosotros mismos…En definitiva, que nuestro camino sigue ahí delante para recorrerlo con más ímpetu y convicción.