Alphabet, compañía perteneciente a la matriz Google, está desarrollando una innovadora solución de almacenamiento de energía renovable a base de sal y anticongelante.

Almacenar energía renovable con sal y anticongelante

Sistema de almacenamiento de energía eléctrica mediante sal y anticongelante

El proyecto en clave se llama «Malta» y se está desarrollando a través de la división experimental ‘X’ de Alphabet, que tiene la misión de inventar y lanzar tecnologías que buscan “hacer el mundo algún día un lugar radicalmente mejor”.

El problema actual de la energía eléctrica es que el proceso de almacenamiento de la misma es muy costosa en grandes cantidades y, por esta razón, tiene que generarse en cada momento la cantidad precisa que se necesita. Con este sistema se asegura que la energía se conserva durante mayor tiempo y en menos espacio que las baterías de iones de litio y, de este modo, competir la energía renovable en precio con otros tipos de generación de electricidad más contaminantes.

La innovadora solución está basada en la diferencia de potencial calórico. La electricidad se separa en corrientes separadas de aire caliente y frío mediante dos tanques llenos de sal y dos llenos de anticongelante o de hidrocarburo líquido. El aire caliente calienta la sal, mientras que el aire frío enfría el anticongelante, un poco como un refrigerador.

El proceso se invierte a través de la parte del motor de turbina, permitiendo que el aire caliente y frío se precipiten uno hacia el otro, creando la potencia necesaria para  girar una turbina y generan de nuevo electricidad a demanda.

Almacenar energía renovable con sal y anticongelante

¿Por qué almacenar energía renovable con sal?

La sal mantiene su temperatura bien, por lo que el sistema puede almacenar energía durante períodos largoa de hasta varios días, dependiendo del aislamiento de los tanques.

La tecnología de Alphabet para capturar electricidad como energía termal es una idea desarrollada por el ganador del premio Nobel Stanford profesor de física Robert Laughlin que creó los fundamentos teóricos de un sistema que almacena la electricidad como calor (en sal fundida de alta temperatura) y frío (en un bajo temperatura en anticongelante, el mismo que usa un automóvil).

Según la comunidad científica, la contribución del proyecto «Malta» a la tecnología de almacenamiento ha sido diseñar un sistema que funciona a temperaturas bajas, por lo que no requiere aislamiento térmicos como cerámicas y aceros que encarece el precio de la energía.

Julian Green, jefe de producto de «Malta» comentó: «»La física termodinámica es bien conocida por cualquiera que haya estudiado lo suficiente en la universidad», agregando que «El truco es hacerlo a la temperatura adecuada, con materiales baratos.

Raj Apte, ingeniero jefe de «Malta» reveló que el almacenamiento térmico basado en sal también tiene el potencial de ser varias veces más barato que las baterías de iones de litio y otras tecnologías existentes de almacenamiento a escala de la red.

Según el Yayoi Sekine, analista de New Energy Finance de Bloomberg, este sistema de almacenamiento de energía renovable podría competir con el litio, pero hay muchos desafíosque afrontar», refiriéndose a los bajos precios del petróleo y el gas natural, una realidad del mercado que ha afectado a varios empresas que trabajan en alternativas limpias a los combustibles fósiles.