Fundamentales para la vida sobre la Tierra, conservando el ciclo del agua y con una diversidad de ecosistemas se encuentran los humedales. Estas zonas naturales son esenciales para todos los seres vivos por su contribución al medio ambiente. En general se conocen cinco tipos de humedales: marinos (arrecifes de coral); ribereños (tierras inundadas por el desbordamiento de los ríos); estuarios (deltas y marismas); lacustres (lagunas) y palustres (pantanos y ciénagas).
Como cada 2 de febrero, se celebra el Día Mundial de los Humedales para concienciar sobre la importancia que estos espacios naturales aportan. Este día rememora la fecha en que se aprobó la Convención sobre los Humedales o ‘Convención de Ramsar’ en el año 1971. Un convenio que, inició el primer tratado en el planeta destinado a proteger los humedales.
Los humedales presentan una gran riqueza natural al ser ecosistemas con una pluralidad biológica. Además controlan los ciclos climáticos y acuáticos, sirven como alberque para distintas especies silvestres, proporcionan zonas de cultivo, purifican y llenan los acuíferos. A día de hoy, la mitad de estos espacios han sido destruidos a consecuencia del cambio climático, de inundaciones, de sequías y de contaminación, entre otros factores. La geografía española presenta hoy un 60% menos de sus zonas húmedas, debido a que durante muchos años han sido considerados como zonas desérticas e insalubres.
El Día Mundial de los Humedales pretende dar a conocer la transcendencia que poseen estas grandes reservas de agua. El desconocimiento de la población sobre estas zonas naturales ha llevado a la degradación y la pérdida de muchos de nuestros humedales. Es por ello que, el 2 de febrero debe ser el comienzo para que todos actuemos éticamente en su conservación, teniendo presente el valor que tienen en nuestro entorno.
“No se aprecia el valor del agua hasta que se seca el pozo”
Como bien dice un proverbio inglés, “no se aprecia el valor del agua hasta que se seca el pozo”.
Los humedales se encuentran gravemente alterados por las sequías y las ocupaciones producidas por la actividad agrícola. La extracción de aguas subterráneas, los vertidos contaminantes y la construcción de infraestructuras de transporte, también han influido. Trabajar en la conservación de estos espacios naturales será invertir en la conservación de nuestro ecosistema.
Asimismo, preservaremos las especies que en el se encuentran. Cuando una zona húmeda desaparece, la flora y la fauna también. Hay especies que solo dependen de estos tipos de zonas y las aves son el grupo más numeroso: la grulla, el avetoro, la garcilla cangrejera, la malvasía, el águila pescadora, la cerceta pardilla o el torillo, son especies que habitan y se alimentan en lugares húmedos.
Cualquier espacio natural alberga numerosas variedades. Conservar el lugar significa conservar los seres que en el habitan y hacer que lo natural siga siendo sostenible. La riqueza natural no se compara con la artificial. Humedales, diversidad y riqueza, trabajemos para su conservación.
Vídeos sobre el Día Mundial de los Humedales
Aquí os dejo unos vídeos. En el primero de ellos podemos ver la actividad que ofrecen diversas aves en los humedales españoles y el segundo nos muestra el papel de los humedales, su evolución y su riqueza natural.
“El hombre extinguió un manglar, ya pagará su maldad.”
Fue santuario prodigioso,
era un bosque pantanoso,
mezcla de agua, dulce río,
con de mar, sal de rocío.
Naturaleza, de luto,
ecocidio en lo absoluto,
por la muerte del manglar,
muy selvático ejemplar.
La humanidad impasible,
sin prever lo previsible,
como si nada ocurriera,
cual si nada sucediera.
Los lotes puestos en venta,
por supuesto, . . . fraudulenta,
que la inversión, que el turismo,
siempre salen con lo mismo.
Todo por un malecón,
del más corrupto . . . bribón,
“uso del suelo, urbanismo”,
¡Dios bendito, que cinismo!
SEMARNAT, en la vergüenza,
FONATUR, que desvergüenza,
interés, por el dinero,
¿qué, el gobierno es usurero?
Que vendrá la gran derrama,
económica proclama,
que la inversión extranjera,
como siempre se exagera.
Que no hubo daño ambiental,
dijera algún tal por cual,
“solo se impactó el ambiente”,
creen que el humedal no siente.
Infinita es la tragedia,
¿tal desastre quién remedia?,
¿a ecosistema, quién ama?,
¿por natura, quién reclama?
Manglar: árbol retorcido,
cerebro humano: torcido;
al caribe mexicano,
le ha pegado un mal insano.
Desmontada está la zona,
cual desierto de Arizona,
flora, plantas humilladas,
las arenas desoladas.
Se ha perdido, así, el vergel,
arboleda inmensa, fiel,
por ambición de unos cuantos,
pasividad de otros tantos.
Los cocodrilos, iguanas,
serpientes, aves hermanas,
han perdido, ya, su entorno,
devastación sin retorno.
Más de veintidós hectáreas,
ocaso de especies varias,
que quedaron a su suerte,
la más insensata muerte.
Aves, crustáceos y peces,
biodiversidad, reveses,
la sabana sepultada,
ya no queda nada, . . . nada.
¿Quién protegerá las costas,
peces, moluscos, las ostras?,
árboles de agua salada,
su carta ya estaba echada.
Muy triste está la marea,
resignación, ¡qué tarea!,
Quintana Roo, pesadumbre,
Cancún, horror, podredumbre.
La tragedia del manglar,
el Manglar de Tajamar,
en el mar azul turquesa,
queda huella de esta queja.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
México, D. F., a 27 de enero del 2016
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
Todo ello visibiliza el proyecto todo por la falta de asignación presupuestal y así se acortarían las brechas porque es aquí en la fuente donde nacen los efluentes y hay que reservar estas reservas acuíferas.
https://secure.avaaz.org/es/petition/Tods_ls_consumidoresas_del_mundo_mundial_Legislar_de_forma_SANA_los_aditivos_alimentarios/?criKvjb