En 2014, los españoles hemos reciclado cerca de 700.000 toneladas de envases de vidrio, un 1% más que en 2013, por lo que la tasa del reciclado se mantiene por encima del 70%, según estimaciones de Ecovidrio, la entidad sin ánimo de lucro que gestiona el reciclado de estos residuos en el territorio español.
La tasa oficial de reciclado de vidrio en España es algo más baja, del 68,9%, según los datos que facilita el Ministerio de Medio Ambiente (MAGRAMA). Sin embargo, esta estimación trabaja con las cifras de 2012, por lo que se espera que el dato actual, correspondiente a 2014, sea algo mayor y ya supere la barrera del 70%, que es la media europea según Eurostat y está muy por encima del objetivo del 60% de la UE.
El crecimiento interanual de la cantidad de envases que los españoles hemos depositado en el contenedor verde, junto a aquellos recogidos a través del sistema puerta por puerta que la entidad tiene implantado en 30 municipios españoles por sus características especiales (por ejemplo, los centros históricos de Vitoria y Toledo) y los provenientes de otras vías como los que se recuperan de las plantas de tratamiento de residuos urbanos, ha sido escaso, apenas 7.000 toneladas (de 687.683 a 694.325), un 1%.
Un aumento, no obstante, nada desdeñable, puesto que nos movemos en cifras verdaderamente significativas. Estamos hablando de que en 2014 se recogieron 2.650 millones de envases, 30 millones más que el año anterior, lo que supone que cada español ha reciclado un envase más este año, de 55 a 56. Lo más importante, que el crecimiento continúa. Lo peor, que los datos parecen algo estancados.
El margen de mejora puede ser ese único envase que cada ciudadano recicló de más en 2014 con respecto a 2013. ¿Y si nos esforzáramos por reciclar no solo un envase más, sino dos? El crecimiento sería el doble. Y si convenciéramos a nuestro entorno de la importancia del reciclaje del vidrio, que de una botella se puede fabricar otra, que se ahorran cientos de miles de toneladas de materias primas y emisiones de CO2, la cifra podría aumentar.
El pasado ejercicio se evitó la extracción de 833.000 toneladas de materias primas, provenientes de la naturaleza, gracias al uso de calcín, el material procedente del vidrio reciclado con el que se fabrican nuevos envases. Además, 465.000 toneladas de CO2 no fueron enviadas a la atmósfera gracias al ahorro de energía que supone este proceso, concretamente 1,8 millones de megavatios-hora. Y estos ahorros se consiguen año tras año.
Los ciudadanos podemos depositar nuestros envases de vidrio usados en unos 195.000 contenedores (6.000 más que el año pasado) que hay repartidos por toda la geografía española. Tocamos a uno por cada 240 habitantes. El 56% de los españoles tenemos un contenedor a menos de 50 metros de casa y, con el sencillo acto de almacenar los envases usados y llevarlos periódicamente al iglú verde, estamos mejorando nuestro entorno, reduciendo la contaminación y contribuyendo al progreso de la sociedad.
No hay Comentarios