Parecería casi un cuento de «Las mil y una noches”, pero, en este caso la realidad ha superado a la ficción; y  esta historia transcurre en India, y el personaje en cuestión no es un sultán, ni un marajá.

nitin bondal

Nitin Bondal tiene una máquina “mágica”, en una fábrica a las afueras de Bombay. En ella suceden cosas extraordinarias, ¿cómo puede ocurrir que el plástico se convierta en petróleo?. Pues esto sucede. Dos hombres trepan hasta la parte superior de la máquina y vacían dentro bolsas llenas de pedazos de plástico roto; y cuando Bondal aprieta el botón, el aparato cobra vida y, en cuestión de una hora, gotas de petróleo empiezan a caer en una botella colocada en el otro extremo.

«Esta es nuestra máquina prototipo, convierte todo tipo de basura en petróleo crudo», dice orgulloso Nitin. «Ponemos todo tipo de cosas ahí, desde plásticos a deshechos electrónicos y neumáticos viejos».

Podrá esta tecnología convertir 150 toneladas de desperdicios en 150.000 litros de petróleo crudo cada día una vez esté enteramente operativa, por el momento funciona como un prototipo.

«Funciona con lo que llamamos sistema policrack«, explica. «Cocinamos el material hasta convertirlo en gas. Cuando calientas un material se libera carbono e hidrógeno», dice.

Tal como señala Bondal, el gas pasa luego a un «catalizador especial», que descompone las moléculas para formar gas hidrocarburo y gas petróleo, que cuando se enfría se convierte en petróleo líquido.

Nitin Bondal y su socio, Raghuvendra Rao, crearon la compañía Sustainable Technologies & Environmental Projects, con la esperanza de empezar a vender crudo en 2013. Desde luego, no les va mal y ya han generado US$12 millones en inversiones.

El caso es que, India se está convirtiendo en uno de los estados que más invierte en en energía limpia. En el 2011 fueron US$10.300 millones, un aumento respecto al año anterior del 53%, según estadísticas de Bloomberg.

India cuenta con el mayor índice de crecimiento en tecnologías verdes entre las mayores economías emergentes del mundo, principalmente en el campo de la energía eólica y solar.

«India es un mercado único para la energía alternativa, ya que el país tiene un déficit energético, altos costes de electricidad y problemas en el sistema tradicional de energía termal», explica Jonathan Winer, socio directivo de Nereus Capital.

«Las innovaciones impulsando este mercado no son necesariamente nuevas tecnologías, sino aplicar tecnologías existentes en soluciones más pequeñas, más descentralizadas que puedan resultar rentables» termina comentando Winer.

India necesita esto y más. Con la cantidad de habitantes que tienen en las principales ciudades y la basura que genera podría ser más que una solución; al menos momentánea.

Fuente: BBC Mundo