El Tenis mundial se suma a la iniciativa patrocinada por la marca de cerveza Coronita llamada Save the Beach. En el torneo ATP de Roma, dos de los mejores tenistas del mundo, unirán sus fuerzas el 11 de Mayo a las 14´30 en un inusual partido de “beach tennis”, demostrando su compromiso con el medio ambiente y ayudando concienciar sobre la degradación de las playas europeas.

Animaros a elegir la playa europea que más os guste y que se encuentre en mal estado, de un listado de las 10 playas más votadas por los internautas hasta el 8 de mayo, se salvará la playa representada por el ganador del partido.

Anteriormente, Coronita ya ha contado con el apoyo de personalidades conocidas para promover el proyecto Save the Beach. En ediciones pasadas se ha contado con la presencia del artista H.A. Shult, Jade Jager o Eugenia de Silva.

¡Demuestra que tu playa merece ser salvada!

Si tu playa está descuidada, lucha por ella y consigue su recuperación, puedes ser premiado.  Sube fotos, vídeos y el motivo por el que debe ser la elegida, antes del 25 de abril a www.coronitasavethebeach.org. El proyecto que esté mejor desarrollado ganará un viaje a Ibiza.

El proyecto Coronita Save The Beach

Coronita Save The Beach es una iniciativa pionera para llamar la atención sobre la degradación de nuestros océanos a causa de la basura plástica que seguimos arrojando cada año a nuestros mares. De las numerosas iniciativas que ha realizado una de las más sonadas ha sido el “Hotel Basura” realizado por el artista alemán HA Schult. Este curioso hotel, realizado con doce toneladas de basura plástica recogida del mar, viaja por el mundo. En enero llegó a España, concretamente a Madrid, donde ya hablamos de él en este artículo.

El problema de la basura plástica en nuestros mares

La Agencia de Protección al Medio Ambiente de Suecia recientemente advirtió que 49 especies de mamíferos marinos corren riegos a causa del plástico.

Además, la asociación medio ambiental italiana Legambiente informó que anualmente entre 700 mil y un millón de aves marinas mueren por ahogamiento o al quedar atrapadas por desechos plásticos.