El hombre con su punto prepotente se ha encargado de destruir todo lo que la bella naturaleza le otorga, y ahora, la naturaleza empieza a cobrar poco a poco cada insulto que el ser humano le ha hecho explotándola.

Bien, hemos sido testigos de los últimos sismos y hace poco la erupción que ha detenido vuelos y que ha causado perdidas económicas en europa de manera  gigantescas. El hombre no debería preocuparse tanto por lo económico sino por lo que se avecina.
Herbert Formayer
, climátologo de la Universidad de Viena, ha declarado que «si las cenizas del volcán islandés llegasen a tocar la estratosfera, se produciría lo que llamamos un efecto refrigerador«.

El efecto refrigerador, sería causado por las nubes de cenizas que a su vez cubriría de tal manera que evitaría la entrada de radiación solar a nuestro planeta. No podría haber una lluvia para limpiar estas partículas que impedirán el paso de los rayos solares, ya que la estratosfera se encuentra a muy pocos kilómetros de distancia sobre la superficie del planeta y esto traería como consecuencia que se quedaran allí estas partículas por años.
Aunque, el enfriamiento puede ser una de las más trágicas consecuencias de ésta erupción y que tendría que llevar un ritmo similar por varíos días para que llegase a suceder, lo que si se tiene seguro es el  rápido derretimiento del glaciar que tiene el mismo nombre de éste volcán, y que si no frena la erupción podría causar daños irreversibles.

En lo que se aclara una posible congelamiento o no, recordemos que la peor erupción que se ha registrado fué Tambora, y tuvo terribles consecuencias, aunque Eyjafjallajokull no ha tenido el mismo desempeño que Tambora es claro que si modificaría de manera drástica el cambio climático.