Estamos a las puertas de la Navidad y ya podemos ir pensando en los elementos recurrentes para poner nuestro hogar a tono con la ocasión. Puede ser una tarea divertida a la que solamente hace falta echar un poco de imaginación, es más fácil si reunimos algunos objetos que ya no utilicemos o que podamos darle un segundo o tercer uso, además del suyo habitual.
En esta ocasión quiero hacerle un merecido reconocimiento a un material que me encanta: el vidrio. Su transparencia me fascina, su brillo y su forma me parece un regalo de los dioses, recordando a Astérix. Por eso, siempre que tengas ocasión guarda en alguna parte de tu cocina esos tarros o botellas que en su día contuvieron algo en su interior. Ahora es el momento, en ocasiones especiales y celebraciones cuando pueden resurgir como si fuesen el Ave Fénix. Quedan impactantes colocados alrededor de la mesa o en algún aparador u mobiliario, y traen el más genuino sabor navideño, rellenándolos como en la imagen con objetos rescatados de la naturaleza (ramas,hojas secas, frutos del bosque…), o con figuritas del belén; todo ello aderezado con sal o bicarbonato, siempre hay que pensar en el medio ambiente, el poliespan es demasiado tóxico, aunque sí se pueden introducir las pequeñas nubecitas de maíz que venden para que jueguen y construyan juguetes los niños, y que se pegan con humedeciéndolas (¡que invento!). Son totalmente ecológicas. Y como observaréis se pueden introducir hasta las “joyas de la corona”, plata y oro resaltan más el carácter festivo.
Otra opción es rellenarlos con chuches o dulces, u otro adorno que resalte la celebración. No hace falta que sean de diseño, en el mercado hay multitud de botellas de zumos que pasarían por ser firmadas por reconocidos diseñadores, y quedan preciosas decorándolas por dentro o por fuera. La cuerda es uno de mis materiales favoritos para adornar (la natural por supuesto, de color claro). Simplemente rodeando la parte superior del cuello del tarro o botella y colocándole una ramita con hojas, se convierte en un detalle muy especial. La pureza y elegancia del vidrio resalta aún más lo que contiene.
Y también puedes introducir pequeñas velas, que te darán una atmósfera cálida y muy reconfortante. Las velas elígelas de buena calidad, de cera de abeja. Son un poco más caras, pero duran mucho más y no emiten sustancias tóxicas e irritantes. Esto es muy importante. Las cererías, son unos establecimientos comerciales que ya están casi extintos, reaviva el comercio tradicional, incluyéndolas en tu recorrido de shopping navideño. Te fascinarán por su intemporalidad. En estas fechas hay que echar una mano a los comerciantes de nuestros barrios, pueblos o ciudades. ¡Ya sabes decora con vidrio: un recurso sostenible y 100% reciclable!
Te invitamos a compartir un momento especial con tus hijos, hermanos, sobrinos, ahijados o con quién más quieras, enviándole a Papá Noel tu pedido virtual!!
En muy pocos pasos podés hacer el pedido y nosotros le mandamos una «copia» de la carta a los papás, para que sepan qué es lo que están esperando 😉
http://www.pedileapapanoel.com