La compañía de moda sostenible suiza Freitag, conocida por la reutilización de lonas de camiones en bolsos y monederos de lo más “cool”, ha lanzado una nueva línea de ropa 100% biodegradable, a partir de un nuevo desarrollo textil compostable, el F-abric. Este nuevo tejido de origen europeo, está compuesto por fibras vegetales que una vez terminado su ciclo útil, servirán de abono para las plantas.

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Freitag buscaba una nueva línea de ropa para sus empleados, pero con un tejido que tuviera el menor impacto en el medio ambiente con una huella de carbono lo más baja posible, por ello uno e los requerimientos era que el producto fuera “local” con una extensión de no más de 2,500 kilómetros de Zurich, la sede de la marca.

Después de 5 años de intensa investigación han lanzado F-abric, un tejido compuesto de  fibras de lino y cáñamo procedentes de Francia, de hayas de Austria e hilada en Eslovenia, Túnez e Italia, y tejidas en Portugal y Polonia. Tras este “tour” por Europa, se puede considerar que el tejido es local, aprovechando incluso los botones y el hilo de coser de otros pantalones.

Una vez conseguido el producto, y tras la fase de diseño, la empresa lanzó una línea de ropa sencilla que incluye pantalones de hombre en tres colores. Para la mujer han lanzado un vestido de cuello babero y otro Henley en dos colores. Además de camisetas unisex de manga corta en cuatro colores, todo completamente biodegradable.

Según la compañía, la nueva línea de ropa 100% biodegradable saldrá al mercado a partir del 31 de octubre.

Sobre Freitag

Freitag, que es viernes en aleman, se fundó en 1993, en Zúrich Oeste, en un antiguo polígono industrial por dos hermanos diseñadores gráficos , Markus y Daniel Freitag, con una inquietud en la mente, ¿Qué pasaba con la tela que cubría los camiones cuando esta se cambia por una nueva? Al comprobar que esta tela terminaba en los desguaces y vertederos, decidieron darle una nueva vida a través del reciclaje.

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Así surgieron sus primeros modelos de carteras y bolsos, que no tuvieron mucho éxito hasta que en 2006 se mudaron a un edificio formado por 6 contenedores marinos puestos en una pila decorados con vivos colores, y en su interior, con un estilo minimalista, presentaron una colección de más de 1500 diseños diferentes de bolsos, bandoleras, maletas, carteras y accesorios para móviles que tuvieron gran aceptación en el público universitario. Tras el éxito entre los jóvenes, se extienden por Europa gracias al éxito por Internet. Hoy en día, tienen tiendas físicas en Colonia, Berlín, Hamburgo, Viena, Tokio y Nueva York. Todo un éxito de unos diseñadores que apostaron por el reciclaje como manera de ganarse la vida.