Seguro que alguna vez has pensado en ir a ver tulipanes a Holanda, los campos de flores a Uttar Pradesh (India) o las lavandas a la Provenza francesa cuando llega la primavera. Ya que estamos en mayo, el llamado mes de las flores, este cangrejo viajero te lleva a algunos de los paisajes florales de nuestro país.
Almendros en flor en la Quinta de los Molinos, Madrid
Cualquiera diría que puedes encontrar este espectacular paisaje en pleno Madrid.
Imagen: Jose Manuel mazintosh
Seguramente cuando hayas visto esta fotografía hayas pensado que te estoy tomando el pelo y esta es una de las típicas imágenes que salen en todas partes de Japón. Pues no: este impresionante bosque de almendros se encuentra en la capital y es uno de los paisajes florales que merece la pena ver y disfrutar. Palabra de cangrejo.
Campos de girasoles, en Sevilla
Este mar amarillo de pipas es uno de los paisajes florales que merece ser admirado.
Imagen perteneciente a: europapress
Para ser sincero, Sevilla no es el único lugar dónde se pueden admirar campos llenos de girasoles. Es muy típico verlos en casi toda Castilla la Mancha y Andalucía. Así que, si pasas cerca de alguno de estos paisajes amarillos, para un rato y disfruta de las vistas.
Dehesas extremeñas, paisajes florales apenas conocidos
Imita a la cigüeña de la imagen y disfruta de las dehesas en primavera.
Imagen: Ardo Beltz
¿Pensaste que las dehesas extremeñas eran un secarral donde sólo crecían encinas? Pues estabas equivocado. La primavera hace que se cubran con una manta de flores haciendo de las dehesas unos paisajes florales inolvidables y llenos de vida.
El valle del Jerte, en Cáceres
El valle del Jerte se convierte en un tapiz blanco al llegar la primavera.
Imagen: soyluiz360
Jerte es uno de esos paisajes florales que no tiene nada que envidiarle a los sakura (cerezos) de Kioto (he de reconocer que, a pesar de lo raros que son los orientales, saben apreciar la belleza). Mi recomendación es que la próxima primavera hagáis una parada en el Puerto de Tornavacas y admiréis las magnificas vistas de todo el valle atestado de flores. Pero si vais pasada la floración, a punto de que empiece la recogida de la cereza, os encontrareis con un paisaje rojo que también os dejara boquiabiertos.
La campiña segoviana, uno de los paisajes florales ignorados
Los alrededores de Ayllón (Segovia) se convierten en un espectáculo, que por ser habitual en los campos castellanos los humanos pasáis por alto.
Imagen: Rowanwindwhistler
Las llanuras castellanas tienen una belleza que muchos no saben apreciar, como ocurre con los campos de girasoles. Te recomiendo que una primavera te vayas tranquilamente a hacer picnic o pasear por estos paisajes florales en Segovia. ¡Y a disfrutar de las vistas se ha dicho!
Los piornales en flor de la Sierra de Gredos, los grandes desconocidos
¿Quién diría que en pleno macizo de Gredos uno puede encontrarse rodeado de flores?
Imagen: Nachosan
Los piornos (Genista florida) son una de esas plantas infravaloradas e ignoradas. Pero cuando llegas al Circo de Gredos y pensabas que sólo había piedras y más piedras y te encuentras con esto, lo mínimo es que se te desencaje la mandíbula de admiración. Los piornales son uno de esos paisajes floridos a los que no se le da importancia, pero que sorprende, y gratamente.
Ya sabes, si quieres disfrutar de paisajes floridos no tienes por qué irte muy lejos. Elige cualquiera de ellos y a correr cual Heidi entre las flores.
No hay Comentarios